Esta tesis se propone a la construcción de una perspectiva teórica que amaitine las aporías y antinomias reveladas por el régimen contemporáneo de imágenes. Las imágenes son un punto de fricción y desasosiego junto de las ciencias humanas, no sólo como un tema de estudio, sino como característica cultural percebida. Este campo se ha definido de manera interdisciplinaria y amplía su perspectiva a una línea de investigación denominada Cultura Visual (Visual Culture). T. W. Mitchell habla de un pictorial turn o incluso un visual turn que estarían relacionados con un enfoque respaldado por infiltraciónes recíprocas entre dos epistemologías, visual y lingüística, lo que cuestiona la premisa naturalizada de comprender el acto interpretativo como el núcleo de la competencia profesional de los especialistas en nuestra área. Las imágenes o visualidades exigen sus propios modos de análisis y requieren del investigador un tratamiento operativo y una consecuente definición de términos que sostenga sus particularidades. Al tema, se suma la reinstalación warburguiana que coincide, no por causalidad, con este giro e induce a investigación fundamental atención sobre la figura y algunas vertientes heurística del trabajo de Aby Warburg, pensador alemán que exploró a principios del siglo XX, un campo de interrelaciones entre antropología, imágenes y arte. En el exemplo Der Bilderatlas Mnemosyne, se anticipa todo una reflexión actual. Las proposiciones de Warburg, así como la investigación teórica de importante exégeta de su obra George Didi-Huberman buscan entender cualquier imagen como un cruce de múltiples migraciones – tanto en su modelo de tiempo, Nachleben, como en su modelo de sentido, Pathosformel – y ofrecen herramienta metodológica central a esta investigación. Desde un marco teórico sistémico, la tesis enfoca el proyecto de artistas visuales, como Harun Farocki, cuyo trabajo realiza una arqueología del saber visual a través de la prospección y montaje de tiempos heterogéneos, mediante imágenes animadas por una potencia expresiva y por un enorme espesor histórico-cultural. La análisis de estos agenciamientos busca delinear su inserción ambivalente en la escena contemporánea, donde se impone el sistema de comunicación como una fuerza estructurante de nuevas formas de socialización a través de prácticas culturales y tecnología, con amplias consecuencias para el campo humanístico, ofrecendo enfoques innovadores a dinámica de articulación de formas de vida y de cultura con las tecnologías de inmediación. La dimensión transnacional del tráfico y la producción de imágenes situa la imagen en el centro de los debates sobre el papel de la representación en las culturas globales. Estas cuestiones podrían cumplirse en dos problemas fundamentales, la hibridación de los campos disciplinarios, la relación entre la imagen y el archivo con respecto a la memoria, la historia, la justicia. En el horizonte de estos problemas, el objetivo de este trabajo consiste en distinguir el papel constitutivo de supervivencias (Nachleben) en la dinámica de la imaginación occidental y las funciones políticas de los agenciamientos de que se revelan portadores.